La tecnología somos nosotrxs
Sala Proceso, CCE Azuay, Cuenca, Ecuador 15th March until May 25th 2018.
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Si para definir nuestra especie nos atuviésemos estrictamente a lo que la historia y la prehistoria nos presentan como característica constante del hombre y de la inteligencia, no hablaríamos del hombre como Homo sapiens, sino como Homo faber. Henri Bergson
TELEFANTE / en un principio conocido como un colectivo que comencé desde del 2005 con Juan Orozco realizando presentaciones de videos performáticas con un instrumento especial desarrolado para hacer momentos interminables de re-combinaciones visuales con materiuales de desecho, y buscando momentos de improvisacion en la realización de numerosas cooperaciones con musicos, actores y los mas disitintos espacios alrededor del mundo. Ahora nos invitaron para particpar en la Bienal de Arte Contemporanea de Cuenca Ecuador sendo parte de la muestra colectiva La Tecnologia somos nosostrxs, la cual fue curada Pedro Soler y Tatiana Avendaño.
El proyecto La tecnología somos nosotrxs busca resituar la relación entre Homo faber y el mundo, saliendo de la narrativa colonial y inventando, o redescubriendo, otros imaginarios y practicas.
“El humano es el animal que fabrica herramientas (faber), que emplea la tecnología –no es el único en la tierra, pero si el más prolífico–, mientras que el pensamiento (sapiens) es una capacidad de muchos seres, incluso vegetales. Por esa razón, autores como Hannah Arendt o Henri Bergson consideran el nombre Homo faber más apropiado que Homo Sapiens para la especie. Hoy, lo que durante milenios fue de bien común o magia natural, se ha desequilibrado, convirtiéndose en una máquina voraz que está acabando con la diversidad cultural y biológica de nuestro planeta. Frente a este nuevo colonialismo, el arte propone estrategias de subversión: otros usos de la tecnología que apuntan a espacios de autonomía imaginativa y formal, a la hi/low tech, al ancestrofuturismo y a la colectividad como relación y relato.”
La instalación audiovisual TELEFANTE, de Juan Orozco y Luis Negroón, conecta tiempos y geografías diferentes a través del encuentro de tecnologías antiguas y contemporáneas en una caja de cartón